Y volvieron los «olés» a Riazor

4 de Octubre del 2003: Deportivo de la Coruña 5 – 1 Atlético de Madrid. Inicios de la temporada 03/04, concrétamente, el tercer partido como local del Dépor en la Liga Española de la ya comentada campaña. Por aquel entonces, nadie lo sabía, pero ese mismo año el equipo blanquiazul llegaría más lejos que nunca en una Liga de Campeones que ya era habitual disfrutar en Coruña; pero esto no es lo que nos atañe ahora mismo. En ese partido frente al club colchonero, sería la última vez que el Deportivo marcaría cinco goles en Riazor… hasta ayer.

Como ya se sabía después del partido frente al Numancia, Miguel Ángel Lotina tendría un serio problema para formar un once, y así fue. Aranzubía en la portería, como siempre; en la zaga: Laure, que fue duda hasta última hora, Lopo, Adrián López y Filipe; como medio centros, los únicos disponibles, Sergio y De Guzmán, ya que Juan Rodríguez jugaría por la derecha, con Lafita en la banda inversa; en la posición de Valerón, Joan Verdú, mientras que de estilete encontraríamos a Lassad. En el banquillo, debido a las numerosas lesiones, se encontraba Seoane, el lateral derecho del filial, por si la milagrosa recuperación de Laure, le pasaba factura.

Por su parte, Muñiz recuperaba para este encuentro a Nicola Zigic y a Ezequiel Garay, aunque no podría contar con dos piezas clave del equipo: Pedro Munitis (o «Chincheta», como lo apodamos muy pocos) y Tchité. Los Luccin, Serrano, Pereira, Zigic… serían los encargados de llevar el peso del ataque de unos santanderinos, que, según decía la estadística de cinco victorias en las nueve últimas visitas, no se les da nada mal la ciudad herculina.

Saque del Dépor, balón largo, la recoge el Racing y gol de Jonathan Pereira. 20 segundos y la pareja Zigic-Pereira ya lo habían conseguido. 0-1 y tres ocasiones de gol en ídem minutos para los visitantes ante la afición deportivista, porque el equipo todavía estaba en el vestuario. Empezaba a funcionar poco a poco el Deportivo basándose en Lassad, que se encarga de mantener el balón cuando era necesario, de tirar desmarques, de caer a banda para crear superioridad… pero tampoco encontraba ese dominio de otros días en Riazor.

La afición se impacientaba con los balones hacia atrás, algo muy habitual tanto en De Guzmán como en Sergio, pero el árbitro les robó protagonismo: Lassad recibe una falta tan un gran regate y la jugada acaba en gol, pero el colegiado lo anula indicando la infracción. Mateu Lahoz se había equivocado en contra del Dépor, pero un minuto más tarde, con intención o sin ella, haría lo contrario al no pitar un penalti muy claro de Lopo, en el que casi le destroza un brazo al pobre Zigic, de tanto tirar. Mientras arreglaban al serbio, Aranzubía, fiel a su costumbre, hacía la gran parada que siempre hace una vez por partido, sacando una mano de puros reflejos.

Ritmo trepidante por momento con ocasiones bastante claras para ambos equipos, partido no apto para cardíacos. Lassad cae de nuevo a banda, esta vez a la derecha, recibe un balón y lo deja de tacón para Laure, otra muestra más de calidad del franco-tunecino, el lateral centra de primeras justo a donde llegaba en segunda línea Juan Rodríguez, que solo tiene que meter el pie y poner el empate en el electrónico. Los de Lotina tenían ganas, tenían prisa, como bien demuestra que tras el empate, Juanro se llevó el balón al centro del campo, para que los santanderinos no perdieran tiempo.

Aranzubía sacaba un pie salvador, Oriol le quitaba el balón de la cabeza a Lassad en el último momento, el árbitro cortaba un ataque del Racing y creaba una contra peligrosa, de nuevo el delantero del Dépor dando un pase entre líneas magnífico… la entrada estaba siendo amortizada a base de ocasiones. Eso si, seguro que el gran partido que se estaba viendo en cuanto a intensidad, no consolaba a los aficionados deportivistas cuando vieron de nuevo a la pareja que metió el primero de los visitantes, hacer el segundo. Esta vez intercambiándose los papeles, centro de Pereira y gran volea de Zigic que ponía en ventaja de nuevo a los de Santander poco más tarde de la media hora de juego.

Las cosas no pintaban bien, ya que el Dépor llevaba más de un año sin remontar un solo partido y aún encima, cuando mejor estaba jugando y más trazas tenía de llegar el segundo local, llegó el mazazo de los futbolistas de Muñiz. Para más inri, Lopo se rompía solo y tenía que pedir el cambio, un hombre más para la enfermería. Entraría al campo Colotto ya en el último minuto de la primera mitad, para cubrir el puesto que había dejado bacante el central catalán. Las ganas de correr ya no eran las mismas y al Racing le venía bien que el tiempo pasara sin que los herculinos se acercaran a su área, así que hasta el descanso se llegaría sin más ocasiones.

Cambio al iniciar la segunda parte. Parece que Lotina hace un cambio muy ofensivo, cambiando a un medio centro defensivo como De Guzmán por Riki; pero no es así del todo. El ex del getafe jugaría por la banda izquierda, pasando así Lafita a la derecha y Juanro, al medio campo, acompañando a Sergio. Lo único de ataque que tiene la sustitución es que, Iván Sánchez Rico, se supone que tiene más pegada, y así lo demostró por primera vez en mucho tiempo. Balón largo de Laure que peina Lafita, cuando parece que Lassad ha perdido de vista el cuero, hace una dejada a Riki, que llega desde atrás para rematar con la punta de la bota, llevando el empate de nuevo al marcador.

Lotina seguía con cara de pocos amigos pese a que su cambio había logrado el efecto deseado. Pero seguro que con el tercero ya estaba un poco más contento. Un saque de esquina al segundo palo le queda a Colotto, que la revienta hacia el área, con tanta suerte que rebota en Lafita, en un defensor y le llega de nuevo a Lafi, que solo tiene que darle como puede para marcar el tanto de la remontada. Tan solo un minuto más tarde, el Racing de Santander comete un pecado capital: dejar a Valerón pensar con espacios. Pase de fantasía del mago hacia Riki, que solo tiene que dejarla correr y definir en el mano a mano contra Toño. 4-2 y el ánimo por las nubes. Tanto, que por mucho que el Racing no se rinde, los locales logran el quinto. De nuevo Valerón orientando el ataque, esta vez hacia la derecha, donde está Lafita, que tiene tiempo para pensar a si centrar al que viene por el primer palo, al del que llega por el medio o al del segundo palo. Finalmente, el balón va al palo largo, donde aparece Verdú para meter la cabeza y de nuevo la suerte en forma de rebote permite que acabe el balón en la portería rival.

¡»Olés» en Riazor! Cuanto tiempo desde la última vez… recuerdos de Champions me vienen a la cabeza, pero también los fantasmas del año pasado, cuando tan cerca estuvo el descenso y el público estaba ahí para sacar el problema adelante. Pues entre «olés» pasaron los minutos que quedaban. Bueno, entre esto y el gol del Racing a la contra, que viene precedido de una empanada gallega a la hora de sacar una falta a favor. El 5-3 no se movería del marcador y los tres puntos se quedarían en Riazor sin mayor problema.

De nuevo el Deportivo en puesto UEFA, perseguido por dos de los llamados «de la otra liga». El calendario es muy favorable a los coruñeses, ya que irán al campo del Sporting, recibirán en el fortín de Riazor al Betis y escalarán la montaña mágica de Montjuic. Partidos a priori asequibles para los de Lotina. Las bajas pueden marcar estos encuentros, ya que se unen al parte Médico tanto Lopo y Lassad acabó con molestias. Guardado y Bodipo se están recuperando y pueden ser dos piezas importantes de aquí al un final de temporada, que invita a soñar.