Wigan 0 – 5 Manchester United o cuando un gol vale por cinco

Dani Navedo - Nueva jornada de la Premier League más igualada de los últimos tiempos. Viaje al campo del Wigan Athletic por parte del Manchester United, en busca de asaltar el DW Stadium y agenciarse tres puntos vitales para no descolgarse de la pelea con los grandes, todavía con la imagen dada ante el Burnley en la retina.

Los de Sir Alex salieron a intentar acallar todas las críticas y su falta de pegada. Hasta Berbatov parecía estar enchufado y tenía una rapidez que escasas veces le hemos visto. Un claro 4-2-2-2 como en los dos anteriores partidos, pero en esta ocasión con dos jugadores más de banda que frente al Burnley, pues Nani y Valencia ocuparían las bandas en lugar de Giggs y Park. Sorprendentemente, Carrick fuera de la convocatoria y no tenemos noticias de que tenga una lesión.

A los pocos minutos, una gran jugada en conjunto del United, acabó en un pase atrás de Nani que remataría Fletcher ya con Kirkland en el verde, pero Bramble se echaría al suelo para bloquear el disparo del escocés. Poco después, otra combinación rápido en medio campo, acabaría en un sutil pase de tacón por parte de Berba que Scholes no conseguiría meter entre los tres palos. Diez minutos tardó el Wigan en pisar campo contrario, aunque Ben Foster no tendría que intervenir hasta los veinte.

Minutos de control de los Red Devils en un principio, pero poco a poco los de Roberto Martínez iban entrando en el partido. Rodallega y Jordi Gómez metieron el susto en el cuerpo a los Sir Alex, pues las contras eran continuas y el medio campo se olvidó, dejando paso a la típica locura que encanta a los aficionados y todo lo contrario a los técnicos. Aún así, se llegaría al descanso con el resultado inicial, con buenas intervenciones por parte de ambos guardametas.

El United parecía arrastrar el mismo problema que anteriores encuentros, pues ocasiones había generado, pero la pólvora seguía mojada. Pese a ello, Ferguson no parecía muy preocupado y no hizo cambios en el descanso; tampoco Roberto Martínez, que seguramente estaría pensando que, de seguir así, el partido sería para los visitantes, pues en un choque roto, siempre el equipo con más talento tiene las de ganar.

Segunda mitad y el dominio para los visitantes de nuevo. El choque parecía llevar la misma dinámica que en los primeros cuarenta y cinco minutos, pero hubo un pequeño detalle que marcó la diferencia: el gol. Llegó el primer tanto, obra de Rooney, rematando de cabeza a la escuadra un centro de Valencia; y con él, llegaron el resto. Cual descarga de presión y de tensión, llegó la lluvia de tantos, entre ellos, poco segundos después, el de Berbatov tras sortear al portero por alto y volear a puerta vacía

Ya con el United relajado y jugando a placer, Rooney con un disparo que desvía un zaguero y acaba en la portería, Owen finalizando con sutileza tras un precioso desmarque y un gran pase de Nani, y el propio portugués de falta directa a escasos segundos del final.

¿Que habría pasado si Rooney no marcara el primer tanto? Quizás el resultado fuese de 0-0, quizás seguiríamos hablando de un United falto de puntería, quizás nos estaríamos preguntando por la misteriosa desaparición de Carrick… pero ese pequeño detalle, ese tanto de Rooney, hizo que el partido finalizase con un claro 0-5 reflejado en el electrónico.