Como reza nuestra web El Fútbol es Injusto, pero sólo a veces, y siempre te da una segunda oportunidad. Y ahí está el Sport Lisboa e Benfica, a punto de cerrar un temporada histórica tan sólo un año después de los desastrosos quince días aciagos del club lisboeta.
Luisao lamentando la derrota en la final de la Europa League (Foto: marca.com)
Hace justo un año el equipo encarnado se disponía a lograr un triplete histórico, pero en 15 días fatídicos de mayo, todo se truncó y de la manera más cruel posible. Todo comenzó el 11 de mayo del pasado 2013 cuando en el minuto 92 de la penúltima jornada perdía el liderato de su Liga ante el Oporto en Do Dragao tras liderar durante todo el campeonato la clasificación. El empate le hubiera valido para ser campeón pero el gol de Kelvin les hizo perder su primer título. Cuatro días más tarde el equipo de Jorge Jesús volvía a una final europea tras 24 años de ausencia, desde que perdieran en el 90 ante el Milan de Sacchi la Copa de Europa en Viena, con un gol de Frank Rijkaard. Esta vez era la Europa League ante el Chelsea de Rafa Benítez. Tras empatar Cardozo el gol de Fernando Torres, otra vez el tiempo de descuento fue cruel con el Benfica ya que Ivanovic, de nuevo en el 92, le daba el título al equipo Blue. Aun les quedaba un bala, pero también se fue al limbo el 26 de mayo tras perder anter el Vitória de Guimaraes la final de la Taça de Portugal, también por el mismo marcador, ese 2-1 que se ha quedado grabado en la memoria benfiquista.
Tras esta debacle, la dirección del club mantuvo la calma, reafirmó en el cargo a Jorge Jesús y los frutos están llegando, aunque no comenzó bien la temporada quedando eliminado de la fase de grupo de la Champions League por el Olympiacos, truncando el sueño de alcanzar la final en su imponente estadio Da Luz y, además, propició la venta de su gran estrella, Nemanja Matic, al Chelsea. Pero eso no afecta a un club acostumbrado a desprenderse de sus mejores jugadores. En los últimos años han salido de Lisboa David Luiz, Coentrao, Ramires, Di María, Witsel, Javi García y el nombrado Matic. El equipo se repuso a tantos golpes y el pasado domingo ganó la Liga 4 años después llevando la locura a la calles de Lisboa.
El Benfica celebrando el título el domingo pasado (Foto: mmdeportes.telediario.mx)
Pero donde está brillando el Benfica es cuando sale de copas. Está en la final tanto de la Taça de Portugal como de la Copa de la Liga y en ambas les espera el Río Ave, además de haber eliminado en las dos a su máximo rival, el Oporto, en semifinales. Tiene en la mano pues un triplete doméstico sin precedentes. Y la guinda llegó esta misma noche tras clasificarse por segundo año consecutivo para la final de la Europa League. Y lo ha hecho por la puerta grande, eliminando a la Juventus, el máximo favorito por plantilla y porque la final es en su estadio, aguantando en la vuelta en Turín el 2-1 de la ida y sobreponiéndose a la expulsión de Enzo Pérez. Pero no sólo la Juve ha quedado en el camino ya que también el PAOK, el Tottenham y el AZ Alkmaar sucumbieron al empuje de las águilas.
Ahora sólo el Sevilla le separa de su vendetta partícular y de volver a abrir las vitrinas destinadas a los títulos europeos que hace mucho que están cerradas en uno de los clubes más grandes e históricos del viejo continente. Eusébio, desde el cielo, estará disfrutando como nunca de sus Águilas.
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