Querido ‘Guaje’

“Estimado David Villa,

Sé que hay algunos ‘culés’ a los que no le gustó que celebrará usted aquel gol en la Supercopa de España con tanta efusividad; aquel gol que casi le cuesta al FC Barcelona el primer (y último) título de la temporada 2013/14 en detrimento del Atlético de Madrid —club que usted defendía, y es obvio que tratase de marcar gol, por mucho que fuese contra su exequipo. Pero claro: esa efusividad y, sobre todo, rabia, con la que celebró aquel tanto, dolió, y mucho, a algunos barcelonistas, a los cuales escuché quejarse de usted a la vuelta en el Camp Nou e, incluso, pitarle. ¡A usted! Que nos dio tantos y tantos goles, varios de ellos ante el eterno rival como el doblete en el mítico 5-0 al Real Madrid; que se partió la pierna por el FC Barcelona; que marcó aquel golazo en Wembley para darnos la cuarta Champions de la historia del club. Que tuvo que vivir varios problemas extradeportivos por si tenía mala relación con Messi. Usted, que siempre lo dio todo y más por la camiseta del ‘Barça’. Por favor…

Tengo la sensación —y ojalá que sea equivocada— de que, de todos los equipos por los que ha pasado, el FC Barcelona es del que menos cariño recuerda, y eso me duele. En Gijón, el club de sus amores, lo aman; en Zaragoza, donde lo vieron crecer, también; en Valencia se convirtió en uno de los capitanes y referencias de la historia ‘ché’, y en el Atleti fue uno de los guerreros del ‘Cholo’ que conquistó la Liga. Estoy seguro que tiene usted un recuerdo magnífico de todos esos equipos, pero a veces dudo de si también recuerda con cariño Barcelona. Futbolísticamente supongo que sí: aquí ganó usted su primera Liga, Champions, Supercopa de Europa, Mundialito… todos los títulos que le faltaban. Pero me estremece la idea de que tenga usted un regusto amargo del ‘Barça’ por su último año, por su más que extraña salida, y por ese pequeño rifirrafe con cierta parte de la afición por la celebración del gol ya comentado.

Yo sólo quiero que sepa, querido ‘Guaje’, que aquí somos muchísimos los que le recordamos como el verdadero crack que es, como un ídolo, porque es lo que realmente se merece. Que la gente que en aquel momento se enfadó por su celebración ya lo tiene más que olvidado, y que aquí todos le queremos muchísimo, Don David. Que sí: que todos sabemos que llegó un año tarde. Que cuando se fichó a Ibrahimović fue un completo error; que era usted quién debía venir. Pero más vale tarde que nunca. Aún recuerdo aquel verano… me compré la camiseta con “David Villa 7” justo después de que hiciera oficial. La lucí todo el verano, y aún ahora me la pongo de vez en cuando; de hecho, el domingo fui al clásico con ella. Porque aunque usted ya no juegue aquí, para mí sigue estando. Sigue estando con sus ánimos, como los que mandó el otro día desde Nueva York cuando dijo: “Espero que el Barcelona gane el clásico“. Hacía tiempo que no me hacían tanta ilusión unas pocas palabras.

Sé que ese deseo era sincero, que siempre va tener un pedazo del FC Barcelona en su corazón, al igual que cada ‘culé’ tendrá por siempre un bonito recuerdo de usted en su corazón. Porque es imposible no querer a David Villa. Y encima, el viernes, Del Bosque aseguró que sigue teniéndolo en cuenta para ir a la selección, y es que al ‘Guaje’ lo aman en Asturias, en Valencia, en Madrid, en Zaragoza, en Barcelona… en toda España. Para muchos (yo incluido) es el mejor delantero de la historia de este país. Porque se hace querer, señor Villa. Y espero que tenga claro que aquí, en la Ciudad Condal, siempre va a ser uno de los nuestros. “Illa illa illa, Villa Maravilla” siempre va a ser uno de los cánticos más bonitos que he escuchado en el Camp Nou, y aún hay veces en las que uno sueña con volverlo a escuchar y, sobre todo, cantar.  Gracias por tus 48 goles de azulgrana. Por sus 119 partidos como “culé”. Gracias por todo, David.

Saludos cordiales”

Un ‘culé’ cualquiera.