Las bebidas energéticas en el rugby

Son cada vez más comunes en el deporte debido a que aportan una rápida hidratación y una liberación de energía que ayuda a los atletas a mantener la forma. Sin embargo, a pesar de que las bebidas energéticas proporcionan bastantes cosas positivas a deportistas de élite, vienen con sus propios riesgos. Ya que estas bebidas han sido un arma vital desde el banquillo durante la Copa del Mundo de Rugby, competición de la que podrás encontrar una guía alternativa en http://news.bwin.es/rugby-world-cup-guide-es/, echamos un vistazo a algunos de los detalles más interesantes.

Estas bebidas energéticas llevan habitualmente componentes que ayudan a mejorar el rendimiento del deportista. Podemos encontrar en su composición habitualmente ginseng, ingrediente que se supone que reduce el estrés y aumento los niveles de energía. Para ayudar a la contracción de los músculos suelen contener creatina, mientras que la semilla de guaraná ejerce como estimulante energético. Efedrina, carnitina, taurina e inositol son otros cuatro componentes que podemos encontrar en este tipo de bebidas, cada uno de ellos, importante a su manera.

Este tipo de bebidas provocan en tu cuerpo una serie de reacciones. Uno de los principales efectos tiene que ver con el cerebro: las bebidas energéticas funcionan rápido para bloquear la adenosina, una sustancia química que tu cerebro genera para dormir. Inmediatamente la cafeína hará que tu cerebro dispare neuronas para estimular un aumento instantáneo de energía. La inyección de glucosa produce también que tu cuerpo se cargue de energía y esté listo para reaccionar ante amenazas. Los niveles de dopamina aumentan, dando al cerebro la sensación de estar a tope de energía.

A otros niveles, como por ejemplo, el sanguíneo, ingerir este tipo de bebidas produce que tu cuerpo entre en “modo alerta”, subiendo los niveles de adrenalina. La adrenalina liberada tiene un efecto en el corazón, haciendo que lata más deprisa para que llegue más sangre (y más oxígeno) a todas las partes del cuerpo y los músculos. Este aumento del ritmo cardiaco probablemente produzca que comiences a sudar con más abundancia, lo cual es peligroso al correr el riesgo de perder fluidos y electrodos. Por supuesto, un abuso de cafeína puede tornar esa energía positiva en ansiedad y sequedad.

Según la experta en salud María Pagano, los riesgos de las bebidas energéticas son todavía desconocidos. Diversos estudios recientes demuestran que aunque sin duda hay algunas ventajas a la corta con las bebidas energéticas, el consumo en demasía de estas puede acabar provocando algunos riesgos comunes y síntomas como palpitaciones, temblores, agitación, problemas gastrointestinales, dolor de pecho, mareos, erupciones en la piel, insomnio, problemas respiratorios o dolor de cabeza.

Redacción EFEI

El equipo de redacción de El Fútbol es Injusto.

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