Offsidefest: la fiesta del cine y el fútbol

Que el fútbol es cultura lo tenemos muy claro en esta web, pero muy a nuestro pesar todavía quedan infieles; herejes que ven en el balompié una ventana de cinismo, necedad y superficialidad. Estas personas, ni entienden este deporte, ni han estado nunca en el Offsidefest.

Al poner un pie en la antigua fábrica de Estrella Damm —el precioso edificio donde tiene lugar el festival— se respira un aroma a romanticismo y, por supuesto, a cerveza. Ese ambiente embriagador hace olvidar que ahí fuera hay otro mundo que no se detiene, que no tiene un instante de respiro. Una vez cruzas la puerta sólo te esperan el fútbol y el cine. Héroes, la mayoría anónimos, que alguna vez se enfundaron una elástica con dorsal y unas botas.

La catorce cintas de esta edición han significado catorce intrahistorias que todo aficionado al fútbol auténtico, a ese que va más allá del césped, debe anotar en su memoria. Desde Europa a América, pasando por África; guerras, manifestaciones, golpes de estado, tragedias, alegrías, superación, abatimiento, horror, humor, crudeza, esperanza, sacrificio, victoria, derrota, valentía…, la pantalla del Offsidefest no se ha perdido ninguno de estos ingredientes.

Por si todo esto fuera poco, el festival ha ido mucho más allá de lo digital. Prácticamente todas las películas venían acompañadas de algún invitado que había participado en su realización: directores, productores y protagonistas dispuestos a charlar y a debatir con el público. Entre estos invitados se encuentran ‘Bob’ Bradley, exseleccionador de EE. UU. y Egipto, y Carlos Caszely, exjugador chileno del Espanyol que tuvo los arrestos para negarle el saludo a Pinochet.

El galardón de la sección oficial, el Premio Estrella, se lo ha llevado Democracia em preto e branco (Democracia en blanco y negro), que conquistó al jurado con su espectacular relato del papel del Corinthians de Sócrates y de la música al final de la dictadura fascista brasileña. Para el Premio Panenka, que otorgaba el público, ha habido que esperar al recuento; finalmente, el galardón se irá a Zambia de la mano de un director vallisoletano. Y es que Eighteam, de Juan Rodríguez-Briso, conquistó a los asistentes relatando cómo la tragedia inspiró a Zambia hasta ganar la Copa de África.

Si a todos estos elementos sumamos la cercanía de unos organizadores que irradiaban pasión por lo que hacían, el cóctel que ofrece el Offsidefest se está convirtiendo en una cita ineludible para todos aquellos que abrazamos con fuerza el fútbol en todas sus vertientes.

Foto de portada: propia
Foto destacada: propia

Miquel Muñoz Sánchez

Allá donde haya un balón, unos pies serán capaces de dibujar arte. Y si no, los cronistas se encargarán de que lo parezca.

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